Entrevista con Card. Pierbattista Pizzaballa, Patriarca Latino de Jerusalén – Última parte

Dic 10, 2025

Su Beatitud el Card.Pierbattista Pizzaballa, Patriarca Latino de Jerusalén, comparte con nosotros su experiencia de vida en Tierra Santa.

Última parte – ¿Cuál es su lugar favorito para orar en Tierra Santa?

Depende de cómo me sienta; a veces Getsemaní, a veces el mar… Donde siempre encuentro paz es en el Mar de Galilea, pero lejos de la gente, solo, en silencio, donde no hay interferencia, ni ruido humano.

Card. Pierbattista Pizzaballa Patriarca Latino de Jerusalén

Card. Pierbattista Pizzaballa Patriarca Latino de Jerusalén

¿Descansa de alguna manera? ¿Tiene algún pasatiempo?

Descansar es ahora una palabra difícil. No hay mucho tiempo, especialmente en este período.

Mi pasatiempo es leer. Me gusta buscar en “Accordance”, un software bíblico. Pienso y hago preguntas sobre la Biblia, sobre los idiomas antiguos, y uso las primeras horas de la mañana para investigar, especialmente el Antiguo Testamento.

Y también la música, especialmente Bach: Nulla dies sine Bach, ningún día sin Bach.

¿Cuál es su oración favorita?

No tengo una oración favorita. Me gustan las oraciones de San Francisco —por supuesto, forma parte de mi formación—, especialmente las “Lodi del Dio Altissimo” [Alabanzas al Dios Altísimo]. Si prestas atención, hay un progreso en sus oraciones. En las primeras, el pronombre “yo” está presente; en las últimas oraciones de la vida de San Francisco, no hay “yo”, solo “Tú”, y eso me gusta. En su última oración, “Lodi del Dio Altissimo”, es solo “Tú, Tú, Tú” dirigido a Dios. Eso es lo que me gusta.

Y, por supuesto, leer los Salmos, la Biblia, especialmente el Antiguo Testamento.

Card. Pierbattista Pizzaballa, Bendición el Domingo de Ramos, Semana Santa 2025

Card. Pierbattista Pizzaballa, Bendición el Domingo de Ramos, Semana Santa 2025

¿Cómo podemos vivir la tolerancia y la paciencia con quienes piensan diferente de nosotros?

Tolerancia no es la palabra adecuada; es una palabra negativa. En hebreo moderno, tolerancia es sōvlanut. La etimología viene de saval, que significa “llevar sobre el hombro”, pero también “sufrir”; algo negativo, pesado para ti.

¿Cómo lidiar con las opiniones de quienes piensan diferente a nosotros? En primer lugar, la diferencia es necesaria. Fuimos creados libres, y el fruto de la libertad es nuestra diferencia y diversidad. Si todos pensáramos igual, seríamos como Babel, donde había un solo mundo y un solo idioma. Es la primera ideología de la historia, “el pensamiento único”. En Génesis 10 hay una lista de tribus y lenguas, pero Génesis 11 comienza diciendo que todos los pueblos hablaban una sola palabra y un solo idioma. Lo opuesto. Cuando Dios destruyó Babel, destruyó ese nuevo orden donde no había diferencias de lenguas. Y en Pentecostés, donde leemos la lista de diferentes lenguas, vemos la plenitud de Babel: las lenguas diferentes permanecen, pero se entienden entre sí. La diversidad y la diferencia son necesarias porque son frutos de la libertad. El diablo no quiere diversidad e impone uniformidad. Debemos trabajar por la unidad, no por la uniformidad.

 ¿Cómo lidiar con esto? En primer lugar, debemos ser conscientes de una cosa: la diversidad es importante. Hay que distinguir la diversidad de la violencia. Debemos respetar las opiniones diferentes, pero no podemos aceptar la imposición, el uso de la violencia, ni abordar la diversidad de manera violenta, porque detrás de esto está el diablo, el deseo de imponer una sola opinión. Hay que ser muy claros, sinceros y honestos, respetar la diversidad y esperar ser respetados. La libertad de los demás es también mi libertad.

 Y ser claros en algo que los católicos a veces olvidan: que existe el mal, el deseo de posesión, y también la elección del mal. En esto debemos ser muy firmes: respeto por la diversidad, respeto por la diferencia, a quienes piensan distinto; pero respetar no significa aceptar lo que es malo.

Card. Pierbattista Pizzaballa en la Iglesia del Santo Sepulcro

Card. Pierbattista Pizzaballa en la Iglesia del Santo Sepulcro

¿Tiene amigos de otras religiones?

Sí, los tengo. Estos tiempos son difíciles. Algunas amistades están ahora heridas, otras más fuertes, dependiendo de cómo manejen la situación. Mi posición no ayuda, principalmente porque la amistad requiere tiempo. Y la amistad necesita, especialmente hoy en día, diálogo, discusión, ser franco; y eso no siempre es posible.

Un mensaje para los jóvenes, para la juventud, especialmente para aquellos que están en una búsqueda.

Hay muchas cosas que podría decirles, pero una importante es esta: que no busquen afuera lo que deben encontrar dentro de su corazón.

Card. Pierbattista Pizzaballa en Jerusalén

Card. Pierbattista Pizzaballa en Jerusalén

¿Tiene algún pasaje favorito del Evangelio?

Depende del momento, porque no somos robots y un pasaje que antes no decía nada, ahora puede iluminar. En este período, como he mencionado en algunas homilías, está esta bienaventuranza: “Bienaventurados los mansos, porque ellos heredarán la tierra”. Vivimos en un tiempo en que el poder y la fuerza parecen decidir. Eso es una ilusión. Lo que importa es lo que construyen los mansos: desde el punto de vista cultural, las artes, y todo en la vida, las relaciones, las familias, son el fruto de lo que los mansos construyen en la tierra.

Las otras bienaventuranzas hablan del reino de los cielos; esta habla de la tierra. Ahora pensamos que las grandes potencias decidirán el futuro del mundo, pero eso no es cierto. No recordamos quiénes eran las grandes potencias hace miles de años; todas se han perdido y todo lo que hicieron terminó. Pero sí recordamos quiénes fueron San Francisco o San Benito. Todo lo que construyeron los pequeños, con mansedumbre y amor, sigue presente.

Gracias por su tiempo. Nos mantendremos unidos a sus oraciones.

 Por Blanca Ramirez, Saxum Visitor Center Manager

 

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